Desde el Programa de Prevención y Atención a las personas afectadas por VIH/SIDA (PAVSA), en la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Salud del Principado de Asturias, mostramos nuestro apoyo al Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociada al VIH
Las CCAA con el Pacto Social por el VIH
En el marco del objetivo del Pacto Social de reducir el estigma asociado al VIH queremos destacar el papel de las Comunidades Autónomas, ya que contribuyen, de forma directa, al impulso de este objetivo.
En este sentido, cabe señalar que algunas Comunidades Autónomas forman parte del Comité Coordinador del Pacto y otras se han adherido recientemente al Pacto Social. El papel de las CCAA es esencial en la construcción de una sociedad más respetuosa e igualitaria, ya que tienen potestad para cambiar normas legislativas que impactan, de forma directa, en los derechos de las personas con el VIH.
Por ello, a lo largo de las próximas semanas queremos repasar las acciones que han desarrollado distintas Comunidades Autónomas, mostrando todo el trabajo que se está realizando desde las autonomías con el objetivo de promover la igualdad de trato a las personas con el VIH.
Asturias en el Pacto Social por el VIH
Desde el Programa de Prevención y Atención a las personas afectadas por VIH/SIDA (PAVSA), en la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Salud del Principado de Asturias, mostramos nuestro apoyo al Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociada al VIH.
El programa está constituido por profesionales de la salud formados en el ámbito VIH/ITS y profesionales de la Salud Pública, en estrecha coordinación con el ámbito asistencial y el
tercer sector.
40 años después, con grandes avances científicos y técnicos realizados, el estigma y la discriminación son barreras que aún es necesario derribar. Directamente relacionadas con la calidad de vida de las personas VIH (cuarto 90), son un reto a doblegar, tanto a nivel estructural como social, y en conexión éstos con el estigma internalizado de las personas que viven con el VIH.
Las nuevas normativas en cuanto a discriminación laboral en la Administración Pública, han sido un paso relevante. La discriminación social necesita de la coordinación de agentes, no solo del ámbito de la sanidad, sino especialmente del ámbito municipal y del tercer sector; su cercanía a la ciudadanía los convierte en vectores fundamentales en la lucha contra la discriminación que aún persiste.
Nuestro compromiso como Comunidad Autónoma, no solo con la desaparición del SIDA como amenaza a la Salud Pública para el año 2030 en el horizonte 95-95-95, sino también con el objetivo de “0 estigma y discriminación”, reto marcado por ONUSIDA y que tanto el Ministerio de Sanidad como las CCAA compartimos. Se enmarca en la colaboración estrecha con la Administración Central y el trabajo con la Administración local y las entidades de acción social, para lograr el derecho, justamente reivindicado, a la normalización de la enfermedad crónica que es la infección por VIH.